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¿La causa? Una pequeña pieza de LEGO en forma de rueda que se quedó atrapada en la nariz de Lasson cuando tenía 3 años. Al menos eso es lo que su padre, Craig Lasson, piensa.
"Me sentía tan mal" dijo el padre a KSL.com. Isaak "dormía con su boca abierta, tratando de poder respirar"
Numerosos doctores checaron la nariz de Isaak y le recetaban antibióticos, pero la semana pasada un nuevo doctor detecto que tenía algo pegado y le preguntó qué podía ser.
"Me puse un poco de espagueti, pero fue hace mucho tiempo", respondió Isaak al médico, según reporta KTLA-TV. Pero no era el espagueti lo que estaba en la nariz del Lasson sino una rueda de LEGO cubierta de un hongo.
"Creemos que lo dobló por la mitad -es bastante flexible- y se lo metió a su fosa nasal", dijo el padre a periodistas.
Aunque Craig Lasson estaba preocupado en su momento y pensaba que era un mal padre porque en tres años no sabía el origen del problema, ahora se siente feliz porque su hijo come y duerme mejor como no lo hacía en años.